Hoy quiero comentarles la importancia que tienen las plantas en la cultura popular y el uso que el criollo les da, como una medicina de circunstancia. Les contaré sobre lo que de ellas leí y de la experiencia que tuve.
Tusca: La hoja hervida de tusca se aplica para el lavaje de heridas, y la misma molida,
como secante.
EL Caldén: Se lo utiliza como medicamento para las ovejas infestadas de lombrices y parásitos intestinales.
Uritu chaqui: Nombre eminentemente quichua, es recomendada para las enfermedades venéreas.
El ancoche: Se lo utilizaba como purgante y contra la fiebre.
El ají del campo: Para curar el dolor de oído.
Palán-Palán : Es una planta conocida en casi todo nuestra República Argentina y la más noble en la medicina popular. Se la utiliza contra dolores reumáticos en forma de cataplasmas y para precipitar la supuración de abscesos o inflamaciones. Machacada y haciéndolas impregnar en grasa da un excelente resultado en aplicaciones contra las afecciones hemorroidales. La hoja masticada se usa para la picadura de insectos.
Recuerdo cuando era niña vi. como curaban un absceso con la hoja de palàn-palán con aceite tibio
El quimpi: Se prepara té con azúcar quemada y se toma en ayuna para evitar tener tos, por experiencia les digo que es muy amargo pero también muy eficaz.
Poleo: La nobleza del poleo es muy apreciada en las provincias del norte, hay de distintos sabores según la característica de la hoja y tiene también distintos gentilicios,
salteño, tucumano, santiagueño, sirve contra resfríos, indigestión etc.
Después les cuento de las otras plantas de nuestra flora y sus usos.